La masoterapia es el arte de la combinación de masajes para lograr efectos terapéuticos. Estas técnicas se utilizan tanto para tratamientos de belleza como para procesos de rehabilitación y recuperación de accidentes o enfermedades. Muchas veces se la combina con la fisioterapia y la kinesiología para lograr mejores resultados.
La masoterapia también es muy útil para prevenir lesiones o contracturas, por eso es muy utilizada en el mundo del deporte.
La masoterapia siempre debe ser hecha por un profesional y se hace sobre zonas específicas con el fin de aumentar la temperatura corporal, activar la circulación, y mejorar los tejidos y la nutrición de la piel. De esta manera, los músculos se relajan y pueden atenuarse los dolores. También ayuda a aumentar el tono muscular y recuperar la tonicidad, esto es muy favorable para personas que hayan sufrido algún accidente.
Las mujeres que hacen Pilates o estreching, podrán complementar los efectos de esas disciplinas con la masoterapia, de esta manera lograrán una mejor elasticidad muscular y una mayor capacidad de contracción de los músculos. También elimina la sensación de cansancio y fatiga muscular, sin contar que es capaz de relajar tanto el cuerpo como la mente, por lo que también se utiliza en los spa.
Para las deportistas o las mujeres que quieren aumentar su rendimiento en el gimnasio, la masoterapia es muy útil porque permite una mayor resistencia muscular, a la vez que disminuye la posibilidad de formación de edemas y mejora la circulación sanguínea.
En el campo de la estética, la masoterapia oxigena los músculos, reduce la retención de líquidos y hace que la piel luzca mejor. Además, es muy útil para tratar el síndrome de piernas cansadas, que se caracteriza por una sensación de cansancio y pesadez permanentes, aún cuando recién nos despertamos.