El embarazo es una etapa muy importante en la vida de todas las mujeres. El ser madres nos transforma en todo sentido, cambia nuestra manera de pensar, de sentir, nuestro sistema endocrinológico se revoluciona y todo nuestro cuerpo y alma se preparan para recibir a una nueva vida.
Durante el embarazo también cambian nuestros hábitos y es necesario que adaptemos nuestro plan de belleza diario, ya que los requerimientos son otros.
En primer lugar, hay que tener en cuenta que se puede estar muy bella durante el embarazo, sólo hace falta ajustar un poco los cuidados. Es esencial que aumentes la hidratación de tu piel, especialmente en las zonas del vientre y los senos, ya que la piel se estirará, y si no está bien hidratada aparecerán las estrías. Elige una crema con vitamina A para todos los días y utiliza un aceite corporal al menos tres veces por semana.
Ten mucho cuidado con el sol, ya que el rostro de las embarazadas es más propenso a mancharse, por lo que siempre debes usar un buen protector. Bebe mucha agua, ya que no sólo beneficiarás a tu piel, sino que ingerir líquido es muy importante porque ayuda a la producción de leche.
Si tus senos comienzan a crecer y sientes dolor o tirantez, te recomendamos usar una crema de caléndulas, que es excelente para ese fin.
Es usual que las embarazadas tengan más acné o puntos negros que de costumbre, para eso lo mejor es utilizar un tónico natural de hamamelis.
A la hora del baño, seguramente te será muy relajante un baño de inmersión, pero ten cuidado de no permanecer mucho tiempo porque podría bajarte la presión y marearte. Así mismo, no es aconsejable durante el embarazo el uso de sales de baño.