Algunas recetas de belleza para el cuidado de tu cuerpo te permitirán también sentirte mejor, pues una receta natural aromática limpiará tu piel y puede contribuir a relajar tu mente y levantarte el ánimo.
Para ello, nada mejor que dedicar un día libre a hacer un tratamiento de belleza completo, descansar, relajarte, limpiar tu piel y sentirte renovada. Mira a continuación cómo hacer en casa baños de limpieza relajantes.
El baño de sal marina, manzanilla y menta dejará tu piel limpia, fresca y hará que te sientas mejor. Puedes hacerlo en un recipiente y allí poner tus pies, o diluirlo en la tina de baño.
Para ello, hierve en un recipiente dos puñados de manzanilla seca con hojas de menta, déjalo macerar durante unos minutos, agrega 200 gramos de sal marina y pon allí tus pies, o viértelo dentro de una tina de baño con agua caliente.
Quédate en la tina disfrutando de los ricos aromas del baño y relájate completamente.
Antes de irte a la cama, nada mejor que un baño de inmersión y mucho mejor si este baño te limpia la piel, y además hace que estés más relajada.
Para hacer un baño calmante de hierbas haz una infusión de partes iguales de manzanilla y lavanda secas, y agrégale una pequeña porción de raíz de valeriana. La manzanilla y la lavanda puedes recolectarla tú misma y ponerla a secar, y de este modo tendrás siempre a mano estos ingredientes para hacer el baño calmante. La raíz de valeriana la consigues en una tienda de productos naturales, no es un producto demasiado caro y sólo necesitas una pequeña porción para agregarla a la receta.
Cuela el té de hierbas y agrega el líquido al agua de la tina. Sumérgete en el agua, relájate y luego ve a dormir para levantarte al otro día renovada.
Una receta natural con aceites esenciales combinados diluidos en el agua de la tina te permitirán sentirte más relajada y también cuidar y perfumar tu piel. Para ello, busca un frasco de tapa hermética grande y vierte en él 1/2 taza de aceite de ricino y 20 gotas de aceites esenciales combinados. La mezcla de aceites esenciales depende de tus gustos, pero ten en cuenta las propiedades relajantes y aromáticas de los diferentes aceites esenciales.
Puedes usar aceite
esencial de romero, de tomillo, de lavanda, de sándalo o aceite esencial de
rosa.