Para corregir problemas de la piel no hay nada mejor que usar mascarillas correctoras que sean naturales. Con ellas se hace una rutina de belleza continuada durante 5 o 6 semanas para notar cómo se solucionan diversos problemas estéticos. Manzanas, ciruelas, frutillas, bananas y limones son los ingredientes con los que puedes hacer en casa diversas mascarillas que mejoran las condiciones de la piel.
Mascarilla antiarrugas hecha con manzana
Corta media manzana, quítale las semillas y la cáscara, y haz con ella un puré. Añade la yema de un huevo batida y mezcla ambos ingredientes. Aplica sobre el rostro durante 20 minutos.
Mascarilla de ciruela para cerrar los poros
Pon en una licuadora 10 ciruelas sin carozo con 1/2 cucharada de aceite de oliva. Mezcla ambos ingredientes hasta obtener una crema suave. Aplícala sobre el rostro y déjala actuar durante 15 o 20 minutos.
Mascarilla de frutilla contra las manchas rojizas
Pon en una licuadora 100 gramos de frutillas con una clara de huevo, y bate ambos ingredientes hasta hacer una crema homogénea. Empapa un algodón y aplica una compresa sobre el rostro durante 20 minutos.
Mascarilla de limón para la piel grasa
Combina en un recipiente la ralladura de la cáscara de medio limón y ½ cucharadita de bicarbonato. Agrega agua mientras revuelves la mezcla hasta lograr una pasta, y aplícala sobre el rostro dándote un masaje con movimientos circulares. Deja que la mascarilla actúe 15 a 20 minutos antes de removerla.
Mascarilla de manzana para la piel seca
Asa una manzana, haz un puré y combínalo con 1 cucharada de mantequilla derretida, y 3 o 4 gotas de germen de trigo. Aplícala sobre el rostro y deja actuar 15 minutos antes de enjuagar.
Mascarilla de limón para las manchas de la piel
Pon en un bol 3 cucharadas de azúcar, 2 cucharadas de aceite de oliva y el jugo de 1 limón. Mezcla los ingredientes y aplica la mascarilla dando un masaje con movimientos circulares.
Mascarilla revitalizante hecha con manzana
Combina en un recipiente el jugo de una manzana con el jugo de una zanahoria, y lávate la cara con este líquido dejando que se seque sobre la piel naturalmente. Pasado este tiempo enjuágate la cara con agua tibia.