El estrés con que vivimos en la sociedad actual hace que en ocasiones necesitemos de tratamientos especiales para relajarnos. En todos los spa hay una variedad de técnicas que nos ayudarán a sentirnos bien tanto física como emocionalmente.
El “Stone massages” es una terapia originaria de oriente que hoy se ha popularizado en todo el mundo. El tratamiento comienza como una sesión de masajes tradicional, pero luego se aplican piedras calientes sobre los puntos energéticos del cuerpo. Algunos masajistas también alternan rocas calientes con otras frías, para estimular las células sensitivas de la piel.
Las piedras calientes suelen colocarse en forma de hilera sobre la conducta vertebral y la nuca, para aliviar las contracturas y provocar la relajación de los músculos. También pueden ponerse sobre el vientre, las piernas, las muñecas o la frente, considerada el punto energético central.
La terapia con piedras calientes logra armonizar nuestra energía y promueve el bienestar emocional. Las piedras que se utilizan en esta técnica son muy ricas en minerales como el zinc, el hierro y la vitamina E. Por eso, además de provocar una sensación relajante, estos masajes ayudan a la renovación celular, estimulan la circulación sanguínea, tiene efectos positivos para bajar la tensión arterial, brinda oxigenación en la piel y contribuye a prevenir la aparición de várices, ya que elimina la sensación de piernas cansadas, a la vez que activa la circulación.
Los masajes con piedras calientes provocan sensaciones placenteras tanto en el cuerpo como en la mente, y hace que toda nuestra musculatura se relaje. También se utiliza esta técnica como una terapia natural para eliminar dolores localizados y para tratar problemas de insomnio. Sólo tienes que dedicarte un tiempo para ti y permitirte sentir los efectos de las piedras terapéuticas sobre tu cuerpo.