Es frecuente que muchas mujeres tengan manchas en la piel. A menudo son de color blanco o marrón claro y puede ocurrir que se intensifiquen al exponerse al sol.
El embarazo puede producir las primeras manchas en la piel, ya que en esta etapa de la vida aumenta la pigmentación de la piel y tanto el rostro como el cuerpo pueden cubrirse de pecas o manchas.
El sol es el principal enemigo de la piel, por eso siempre debes utilizar un protector adecuado para broncearte en forma pareja y evitar la aparición de manchas blancas. También es importante que quites todo tu maquillaje e incluso el perfume antes de exponerte al sol. Además, evita utilizar aceites a modo de bronceadores, porque son los que más manchas producen en la piel.
También hay algunos factores médicos que predisponen a la aparición de manchas, ya que muchas veces surgen como consecuencia de un déficit de vitaminas o minerales o por un desajuste hormonal, por lo que siempre se aconseja realizar una consulta con el médico.
Para prevenir las manchas, podemos utilizar una crema despigmentadora, que tiene la función de ir aclarando la piel progresivamente. Sin embargo, el buen resultado depende de la constancia en el tratamiento. También existen técnicas más sofisticadas como el peeling y el láser.
Pero además de realizar el tratamiento que te sugiera el dermatólogo, puedes probar con unas mascarillas naturales especiales para atenuar las manchas en la piel. Para esto necesitarás yogur natural y zumo de limón, mezcla muy bien los ingredientes, y colócate la crema obtenida sobre el rostro durante 20 o 30 minutos. Luego, enjuaga con agua tibia. Y realiza el mismo procedimiento durante una semana o diez días. Descansa unos días y vuelve a insistir con la mascarilla, progresivamente las manchas irán desapareciendo.