Una de las grandes preocupaciones femeninas son las estrías, esas molestas y antiestéticas grietas que aparecen en la piel y que es tan difícil e incluso imposible quitar.
Son muchas las causas por las que pueden aparecer las estrías, aunque es frecuente que aparezcan cuando no hidratas correctamente tu piel, cuando aumentas mucho de peso, o cuando, por el contrario, bajas muchos kilos. El embarazo también es un momento en que las estrías suelen aparecer y los deportistas que utilizan esteroides también tienen mayor riesgo de tener grietas en la piel.
Las zonas del cuerpo donde más comúnmente aparecen las estrías son el vientre, los brazos, los senos y las piernas. Algunas estrías son de color rojo y otras son blancas. Lamentablemente, éstas últimas son las más difíciles de quitar, incluso quedando en nuestra piel de por vida.
Para combatir las estrías es importante cuidarnos antes de que aparezcan las primeras marcas, por lo tanto, debes evitar el sobrepeso y utilizar una crema hidratante una o dos veces por día por todo el cuerpo. Si estás embarazada, usa una crema especial contra estrías y una emulsión de caléndulas, también puedes utilizar un aceite corporal luego de ducharte.
Además, debes beber mucha agua, comer frutas, llevar una alimentación variada que incluya todos los tipos de vitaminas y minerales, y realizar ejercicio físico para estimular la buena circulación sanguínea. Cuando te duchas, puedes realizarte masajes en forma circular en todo el cuerpo.
El zinc es uno de los minerales más importantes para prevenir la aparición de estrías. El zinc se encuentra en importantes cantidades en alimentos como los mariscos, las carnes, los huevos, los frutos secos, los frijoles y los granos enteros.
También puedes utilizar aceite de coco, de almendras o de ricino en las zonas propensas a las estrías, para evitar o al menos retardar su aparición.