Para eliminar todo rastros de impurezas de la piel, nada mejor que un buen exfoliante natural, porque además de limpiar profundamente cuidará tu piel naturalmente, sin exponerla a productos químicos conservantes.
Para hacer una rutina de belleza en casa, nada mejor que comenzar con una limpieza profunda.
Si bien hay varias recetas caseras para hacer exfoliantes, mencionaremos algunas, que son las más sencillas de realizar (y que cuentan con una buena reputación por ser efectivas).
Ten en cuenta que un producto exfoliante, cualquiera sea, no puedes utilizarlo con mucha frecuencia. Haz la rutina de belleza una vez a la semana o cada 10 días.
Conocidos son los resultados de limpieza profunda que reporta la mascarilla de avena y leche. Sin embargo, puedes realizarla solamente con agua, si lo que buscas es sólo un efecto exfoliante.
Pon la avena en un recipiente y ve agregando el agua tibia de a poco, hasta hacer una crema espesa. Aplícala sobre el rostro con movimientos circulares, utilizando la yema de tus dedos, ejerciendo una presión suave y evitando la zona de los ojos.
Este exfoliante natural es muy sencillo de preparar. Simplemente, coloca en una taza 2 cucharadas de azúcar y añade el jugo de 1/4 o 1/2 limón, dependiendo de su tamaño. La mezcla debe quedar firme, para que no gotee. Aplícala con movimientos circulares y enjuágate la cara con agua tibia.
Haz el mismo procedimiento que has leído para hacer el exfoliante de avena, utilizando en este caso harina de maíz. Cuida la consistencia, que no debe ser muy líquida.
Si no tienes en casa ninguno de los productos mencionados en las mascarillas anteriores, igualmente puedes hacer un buen exfoliante utilizando tu crema removedora de maquillaje y una cucharadita de café. Aplícate la crema normalmente, dándote un masaje en círculos, como se aplica cualquier exfoliante, sea o no natural.