Recetas naturales para limpiar la piel profundamente

Cómo limpiar profundamente la piel con productos caseros

Con productos naturales e ingredientes que se compran en una tienda de comestibles, se pueden hacer diversas recetas naturales para limpiar la piel profundamente. El secreto está en hacer una mascarilla facial que remueva las impurezas sin agredir la piel, y que además refresque, humecte y suavice.

Haciendo un exfoliante casero puedes conseguir estos efectos rápidamente.

El exfoliante casero se puede hacer con diversos productos naturales e ingredientes alimenticios. Veamos dos recetas artesanales, como el limpiador de germen de trigo y el limpiador de almendras.

Limpiador profundo de germen de trigo

Ingredientes:

• Germen de trigo
• Harina de maíz
• Flores de manzanilla
• Avena
• Agua

Procedimiento:

Mezcla en un recipiente el germen de trigo, la harina de maíz y la avena en partes iguales. A continuación, haz un té de manzanilla muy concentrado y ve agregándolo a los ingredientes secos, mientras revuelves para hacer una pasta consistente.

Toma con tus dedos un poco de crema y comienza a darte un masaje suave por todo el rostro, evitando los ojos y el contorno de los mismos, pues esta es una zona muy sensible que se puede irritar. Deja actuar el limpiador 10 minutos y lávate la cara con agua tibia. Usa el exfoliante una vez a la semana o cada 10 días.

Limpiador profundo de almendras

Ingredientes:

• Almendras
• Avena
• Maicena (fécula de maíz)
• Flores de manzanilla
• Procesadora

Elaboración:

Coloca en el recipiente de la procesadora iguales cantidades de almendras, avena y maicena, y procesa hasta que se hayan pulverizado las almendras. A continuación, haz un té muy concentrado con las flores de manzanilla y ve vertiendo de a poco el líquido en los ingredientes secos, hasta formar una pasta espesa. Utilízala como exfoliante dándote un masaje suave sin aplicar en la zona de los ojos. Deja actuar 10 minutos y enjuaga con agua tibia.

Usa el limpiador profundo de almendras una vez a la semana o cada diez días, y recuerda: No debes abusar de los exfoliantes, pues pueden irritar y dañar tu piel. Aplica cuando hagas una rutina de limpieza completa y luego ponte una crema suavizante natural.