Son muchas las razones por la cual la piel puede enfermar y lucir mal, verse irritada o con un color irregular. Una afección llamada
dermatitis puede ser la causa de que tu rostro se vea enrojecido, inflamado o con picazón y urticaria. Pero la
dermatitis no sólo afecta a la cara, también puede extenderse por otras áreas del cuerpo, e incluso, puede aparecer descamación.
Causas de la dermatitis
Son muchas las
causas que pueden hacer que suframos dermatitis. Muchas veces es una afección transitoria provocada por algún virus. En otras ocasiones, también está relacionada con reacciones alérgicas provocadas por algún cosmético como puede ser un jabón, shampoo, una crema o las tinturas industriales. Aunque los jabones líquidos antisépticos son los que más reacciones alérgicas generan.
Algunas mujeres también sufren del
enrojecimiento e inflamación de la piel cuando están en ambientes muy calefaccionados. Diversas investigaciones científicas también encontraron evidencias de que las
personas asmáticas son más propensas a desarrollar dermatitis.
En las pieles más sensibles, la exposición al sol también puede desencadenar la dermatitis, como así también el uso de bijouterie de materiales que no sea el oro.
Hay que tener en cuenta que el consumo de algunos medicamentos también puede
provocar reacciones alérgicas en la piel.
Cómo tratar la dermatitis
El tratamiento para la dermatitis depende de la causa por la cual se generó. Si la afección es producida por el uso de un cosmético, lo mejor es suspender su uso y en pocos días tu piel volverá a estar bien. En el caso de ser un cuadro más agudo, es conveniente acudir al médico para que recete un corticoide. En el caso de las personas que sufren de
eczema o dermatitis crónicas, pueden acudir a algunas
recetas naturales para aliviar la inflamación del rostro. Por ejemplo, pueden utilizar un limpiador muy suave de agua de pepinos o realizar una mascarilla con yogur natural. Las compresas con agua fría también pueden ayudar.
Lo que se debe evitar si tienes dermatitis
Es importante que las personas que sufran este problema
eviten exfoliar la piel, ya que de esa manera sólo lograrán irritarla más. También
evita utilizar productos con lanolina, como por ejemplo las toallitas demaquillantes. Trata de no permanecer en ambientes calefaccionados y mantener la piel siempre hidratada
para evitar la descamación. Si la
dermatitis se localiza en las manos, utiliza guantes para lavar los platos y para limpiar la casa, porque el contacto con el detergente y otros productos empeorarán el cuadro.