Si bien es cierto que la práctica de deportes y la gimnasia son un medio efectivo para combatir el estrés, en gran medida esto funciona según cómo planifiquemos y desarrollemos la rutina física. Es probable que, si no se encuentra el tiempo necesario o se quieran obtener resultados inmediatos, se consiga el efecto contrario, es decir, aumentar la ansiedad y la tensión.
A continuación, veremos algunas recomendaciones para adoptar un programa de ejercicios en casa y reducir efectivamente el nivel de estrés.
El punto de partida es que adoptes una actitud firme, y al mismo tiempo, despreocupada, para planificar la rutina física. Es decir, comienza programando un horario flexible para practicar los ejercicios, empezando con prácticas no muy extensas, para luego ir incrementando el tiempo en la medida que tu cuerpo se vaya acostumbrando y te sientas con más energía.
Para ejercitarte en casa, puedes fácilmente descargar de internet ejercicios de todo tipo, como Tai Chi, Yoga y Pilates. Busca variadas lecciones para principiantes, para no hacer la práctica monótona y que puedas divertirte mientras haces gimnasia.
Realiza el ejercicio de forma moderada, para no exponer tu cuerpo a lesiones, y también para reducir tu nivel de estrés. Los expertos afirman que un ejercicio demasiado intenso puede producir una elevada acidosis (acumulación de sustancias ácidas en el organismo) lo que provoca un aumento en la producción de radicales libres, generando irritabilidad, mal humor y un estado de tensión.
Otro factor que debes tener en cuenta al abocarte a una rutina de gimnasia en casa, es cómo te ves a ti misma. Por lo general, si tienes una autoestima elevada, el ejercicio tenderá a aliviar tu estrés; en caso contrario, lo aumentará. Ello es porque si no tienes una imagen positiva en cuanto a tu persona, puedes sentir una gran presión para alcanzar buenos resultados, y así no disfrutarás de la actividad y terminarás sintiéndote más estresada que al comienzo.
Por último, ten en cuenta que el ejercicio físico es una práctica que redunda en tu propio beneficio. No te sientas en ningún momento obligada a realizarlo como si fuera una tarea desagradable que tienes que concluir. Diviértete y disfrútalo, y cancela la rutina del día si no te sientes de humor como para pasar un momento agradable. Esa es la clave principal para lograr una buena figura, un excelente estado anímico y reducir el estrés.