Una forma de proteger y embellecer las uñas es colorearlas en base a los tonos de la vestimenta que vayas a usar. En cualquier caso, las uñas degradé combinan de manera perfecta, pues los tonos siempre armonizarán con el color base de la ropa.
La técnica es muy simple, y verás a continuación cómo se aplica el esmalte para lograr bellas uñas en degradé.
Para hacer el efecto, necesitas un color de esmalte base (a tu elección), y un esmalte blanco mate. Luego, procede de la siguiente manera:
Consigue cuatro recipientes muy pequeños para hacer los colores, que pueden ser tapas de refrescos. Pon en cada uno un poco de esmalte base, al primero le agregas una gota de blanco, al segundo dos gotas, al tercero tres gotas y al cuarto, cuatro. La quinta uña la pintas del color del esmalte puro, para tener toda la gama de color. Puedes hacerlo también en dos tandas para que el esmalte no se seque.
Sólo recuerda tener a mano otro recipiente con quita-esmalte, para limpiar el pincel luego de que apliques un color y así no se entreveren los tonos.
Opta por un tono base más claro para el día y un tono más oscuro para la noche, combinando los colores de las lacas de uñas por tonos complementarios con el resto del maquillaje y vestimenta.
Para pintar las uñas en degradé y queden impecables, sigue este procedimiento:
Quita el esmalte viejo de la uña utilizando un algodón embebido en quita-esmalte, lávate las manos con agua y jabón, y las uñas con un cepillito.
Suaviza las cutículas aplicándote unas gotas de aceite de oliva, y retíralas hacia atrás con un palito (no las cortes, pues crecerán más grandes).
Ponte una crema de manos y hazte una manicura completa, cortando la piel muerta y limando las uñas, hasta que estés satisfecha con la forma de las mismas y la condición general de tus manos.
Agita bien el envase del esmalte y frótalo entre las palmas de tus manos, haciéndolo rodar. Desenrosca la tapa y limpia el excedente de pintura en el borde del envase. Pon un poco en los recipientes y haz las mezclas de color, pinta el centro de la uña desde la base hasta el extremo, siguiendo por el lateral izquierdo y derecho, o viceversa, y deja secar completamente.
Una buena idea es aprovechar los viajes en coche para pintarte las uñas, pues de esta manera ahorras tiempo y puedes sacar las uñas por la ventanilla, haciendo que se sequen en segundos. Se trata de un consejo para poner en práctica cuando vayas a un evento o reunión y no tengas tiempo para pintarte las uñas en casa. Eso sí, de esta manera, ¡no puedes conducir tú!.