¿Te gustaría hacer un talco casero que, además, tenga el aroma de las hierbas que tú misma has recolectado? Puedes probar con flores secas como la lavanda para hacer talco de lavanda, con jazmines, menta o la hierba que prefieras. Termina la elaboración envasándola en una bonita talquera y obtendrás un delicado talco aromático muy personal.
Para comenzar, sal a recolectar las hierbas para fabricar tu propio talco cuando el sol ya esté alto, para darle tiempo a que el rocío de las plantas se evapore.
Junta las hierbas y flores, y colócalas en ramilletes en papel absorbente hasta llegar a tu casa. Una vez allí, cuélgalas a secar boca abajo en un lugar oscuro y fresco.
Una vez se hayan secado las hierbas, muélelas con el mortero bien finas, y resérvalas con los demás ingredientes para hacer el talco natural.
También puedes comprar las hierbas o las flores ya secas, o acelerar el secado en un horno microondas u horno convencional. Para ello, deberás hacer una prueba, pues no todas las flores y plantas secan a la misma potencia y en el mismo tiempo.
Ingredientes:
Elaboración:
Esta receta es una base para que puedas elaborar tu talco personal. Tú puedes cambiar las proporciones de tal o cual ingrediente para hacerlo más fino, más consistente o más perfumado. Prueba otras opciones, como el uso de un aceite esencial envasado, para hacer un talco de una hierba que no puedas conseguir de forma natural. De todos modos, el resultado será un fantástico talco aromático.