De los 2,5 millones de toneladas que se producen de té anualmente en el mundo, el 20% pertenece a la variedad de té verde. Esta infusión es consumida tanto por aroma y sabor, como por sus propiedades curativas y cosméticas, entre las que se encuentran su poder de proteger la dentadura sana, vigorizar el físico y la mente, astringir, curar, revitalizar la piel y retardar el envejecimiento celular.
Antioxidante natural
Los componentes químicos de esta variedad de té (tanino y catequina) hacen de él un potente antioxidante, incluso más potente que la vitamina E.
Evita el desarrollo de células cancerígenas y protege al cuerpo de los efectos nocivos de los rayos UV.
Protege la dentadura
El té verde es rico en minerales y microminerales, y por ese motivo es beneficioso para la dentadura. Utilizado diariamente como enjuague luego del cepillado, previene la caries dental, cuida la salud bucal y es especialmente recomendado para la Gingivitis debido a su poder astringente.
Energizante físico y mental
El té verde mejora la concentración y el vigor, es relajante, estimulante y fortalecedor del organismo, y es utilizado por los atletas por su rica composición en minerales, lo que potencia el buen estado físico.
Como tratamiento contra el agotamiento mental se recomienda beber 2 o 3 tazas por día, y su efecto se potencia al realizar una ceremonia del té al estilo chino, pues de esta manera, aumenta el efecto anti estrés.
Para el agotamiento físico, bebe 1 litro de té verde diariamente.
Anti-inflamatorio, antioxidante y protector de la piel
Los efectos antioxidantes de esta infusión actúan tanto por intermedio de su ingestión como de su uso externo, para embellecer la apariencia de la piel. Retarda el proceso de envejecimiento, ayuda a conservar la humedad y frescura del cutis, fortalece la capa protectora de la piel, alivia los efectos producidos por la prolongada exposición al sol y reduce la inflamación, además de ser un poderoso astringente muy utilizado en productos cosméticos.
Para las quemaduras de sol, aplica varias compresas de té en la zona afectada varias veces al día, para el cuidado de la piel seca lávate el rostro por la mañana y por la noche con una infusión fresca, y bebe el té de forma periódica.
Utiliza una tetera que se utilice exclusivamente para preparar té verde, a la que nunca debes lavar con ningún detergente, sino solamente con agua y té.
Al adquirir té verde, elige los envasados al vacío y en pequeñas cantidades, para asegurarte que permanezca fresco. Consérvalo en frascos oscuros o latas herméticas en lugares frescos y secos.